Conocer las imágenes y creencias que tienen los docentes investigadores sobre las realidades científicas que pueblan su mundo educativo, problematizar sus posturas frente a los procesos de institucionalización de su quehacer y determinar los enfoques teóricos y pedagógicos que orientan su accionar resultan, entre otros, recursos valiosos para caracterizar —lo que podría denominarse— la identidad de la investigación en educación en nuestro país. Este estudio pretende ir más allá de un inventario o un recuento de las formas de hacer investigación en educación e intenta adentrarse en alguna de las competencias y actuaciones que los docentes-investigadores despliegan en el desarrollo de su actividad académica. En tal sentido, se analizan de un lado las distintas formas de entender la actividad investigativa en los programas de formación de docentes en el contexto de la acreditación; esto es, las orientaciones teóricas y prácticas, la organización y funcionamiento de la actividad, sus modos de estructuración curricular, los modelos pedagógicos y didácticos que se descubren o reafirman en dicho proceso; y del otro, se analiza la percepción del impacto académico, social y político que según los docentes-investigadores tienen para el país el desarrollo de su actividad. En ambos casos se pliega la mirada sobre las formas de comunicación y entendimiento de las comunidades de investigación, así como en los modos de legitimación de ese accionar.