La estabilidad de las Relaciones Internacionales depende en gran parte del ritmo del cambio social en todo el mundo. Ya lo menciona el secretario General de las Naciones Unidas en su Memoria Anual 1989 cuando señala que "el ritmo de este cambio socialen todo el mundo se ha acelerado de tal modo que la presión de los individuos y las instituciones sociales básicas obstaculiza el funcionamiento eficaz de los organismos encargados de mantener el orden. La frecuencia con que se viola la ley produce un temor generalizado e infunde en el individuo un inquietante sentido de inseguridad".