El tratamiento surrealista de la pintura ha sido una de las vías de mayor alcance en la transformación de la sensibilidad contemporánea. La importancia del problema a la hora de estudiarlo radica en el transfondo renovador que conlleva la estética surrealista. Se ha hablado mucho del movimiento y de la pintura surrealista; en cambio, se ha dicho poco acerca del alcance de sus planeamientos y aportaciones, acerca de la manera en que las actitudes y producciones surrealistas interesan y afectan a los problemas generales de la estética en nuestro siglo. La mirada interior trata de reconstruir la teória surrealista de la pintura, de mostrar que el giro que con el surrealismo se produce desde una concepción de la pintura basada en el modelo exterior desde una concepción de la pintura basada en el modelo exterior al modelo interior, supone la transformación de los criterios de fundamentación del arte engeneral y de la pintura en particular. Y afecta no sólo a la pintura surrealista, sino al proceso global de las artes visuales de nuestro tiempo.