El art.20.1.b) de la CE reconoce y protege como derecho fundamental el derecho "a la producción y creación literaria, artística, científica y técnica". Este precepto consagra el derecho subjetivo a la libertad de producción y creación en esos campos y no sólo conecta perfectamente con los derechos a la libre comunicación, investigación y recepción del pensamiento, sino que al igual que la libertad de cátedra, es una especie del derecho de libertad de expresión. Desde esta perspectiva, este último derecho tendría tres posibles modalidades: libertad de expresión a través de los medios de comunicación, libertad de expresión mediante la docencia y, finalmente, libertad de expresión a través de la producción o creación artística, científica y técnica.